El bambú es un material increíble como materia prima, ya sea que se use para hacer andamios para la construcción o para hacer la ropa de cama más suave que jamás haya tocado.
1. Es autocurativo y de rápido crecimiento.
¡El bambú es sostenible debido a la velocidad a la que crece! Una planta de bambú puede crecer y estar lista para la cosecha en 3 a 5 años, lo cual es un proceso mucho más rápido y, por lo tanto, más sostenible.
El bambú también se autorregenera, lo que significa que una vez cosechado, comenzará a regenerarse por sí solo, sin fertilizantes ni pesticidas. Seis meses después de la primera cosecha, el bambú volverá a crecer y comenzará a madurar.
2. Produce menos emisiones de carbono que los productos a base de algodón.
El bambú en realidad absorbe un 30% más de CO2 que los árboles de hoja y el algodón. También libera un 35% más de oxígeno que la planta de algodón.
3. Se necesita menos tierra y un 30% menos de agua para cultivar bambú
El cultivo de materiales para usar en nuestra vida cotidiana puede ser un proceso intensivo que requiere mucha tierra y agua. El bambú, sin embargo, requiere menos tierra para crecer porque es autorreparable y usa la tierra de una manera más sostenible.
4. No se necesitan productos químicos ni pesticidas para cultivar bambú.
Una última razón por la que el bambú es sostenible es porque no se necesitan fertilizantes, pesticidas ni otros productos químicos para cultivarlo. Esto no solo es mejor para el planeta, también es mejor para nuestro cuerpo, ya que la ropa de cama está en contacto directo con nuestro cuerpo.
Ahora que sabes que el bambú es un material sostenible, quizás quieras introducir este material en tu día a día, empezar por tu ropa de cama es una excelente forma de contribuir con el medio ambiente, así como con tu bienestar.
Nuestra ropa de cama está hecha 100% de bambú sostenible certificado por EOKO-TEX.
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